clásico para dormir el sábado último, los 2 se cuidaron de más y no perder era lo esencial, penoso juego para ser un clásico ya con público por fin.
De los incidentes, simplemente nefasto, pero más aún oir al hijo del presidente rojo poner en sus redes que la postal del clásico fueron las escupidas, o decir en su programa que eso es parte del folklore aquí y en cualquier parte del mundo, nefasto.