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VooDoo Child
04-Sep-2006, 10:55
me mandaron esto por correo
y lo publico, me parecio interesante leerlo y pues la verdad tambien es que el chavo que lo escribio es cuate

mario palomo (dueño de thebox)

ahi s elos dejo

Contra el marfil de la torre
Por Mario Palomo
- Guatemala, 2 de septiembre de 2006 -
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¿Por qué y para quién escribe uno, en medio de una sociedad tan profundamente desigual como la nuestra? Preguntas frecuentes que las más de las veces lo que reclaman no son respuestas concisas sino "obras maestras" hechas apenas de excusas y justificaciones, que a la vez sirven a la pálida tarea de darle forma al maravilloso absurdo de estar vivo y sin Dios. Sin embargo, las interrogantes quedan como dedos filosos punzándonos la garganta, mientras nos exigen y nos acusan.




En un entorno que pareciera haber hecho de la crisis social una suerte de regla de "normalidad", escribimos, creo, con el afán de llamar a las cosas por su nombre y bajo el convencimiento de que la desgracia no tiene que ser nuestro destino, pero también, y a pesar de las evidencias, porque nos negamos a asumir la cultura dominante que condena la condición humana a mera cloaca que confirma el sistema.




Sin afán de contarnos cuentos, quienes escribimos (bien o mal) provenimos de una minoría y escribimos para ella, aunque así nos identifiquemos, sin paternalismos ni heroísmos de opereta, con las causas y la suerte del caudal humano negado por el sistema, el cual, en su mayoría no sabe leer: los desocupados, los campesinos, los obreros, los rebeldes, las prostitutas, travestís y demás legiones de malditos pertenecientes a las mayorías excluidas y anónimas. A pesar de ello, alimentamos la esperanza de conversar con todos, devolviéndoles en igual medida lo que de la desgarrada experiencia colectiva recibimos a diario, pues de ella participamos y a ella pertenecemos.




En esa medida, cuestionamos a aquellos escritores que se sienten legatarios en línea directa de la "civilización" (o por lo que por ella entienden quienes se limitan a imitar con torpeza y mal gusto los cánones de derroche y ostentación que las clases dominantes imitan a su vez de Dallas o Miami), y por lo tanto de la "verdad" y la "belleza" las cuales creen transmitir como si le estuvieran haciendo un favor a las "masas" de las que se sienten "incomprendidos", pero que las dicen representar aunque "ellas no agradezcan", del mismo modo que aquellos bien intencionados intelectuales de "izquierda", quienes desde el paternalismo culposo y políticamente correcto de las oenegés pretenden "bajar" al nivel de las masas para comunicarse con ellas. Hasta un militante de hueso colorado como lo era Lenin fue capaz de burlarse de la sensiblería piadosa de la pequeña-burguesía desde la cual ciertos intelectuales se arrogan el papel de escribir "en nombre" de la clase obrera y piensan "que es suficiente con hablar a los obreros de la vida en la fábrica y con machacar lo que ellos saben desde hace mucho tiempo". Ambas posturas no son sino la cara y la contracara de una misma actitud que por operar desde las alturas, irremediablemente desprecian lo que ignoran.




Quizá por eso nunca he compartido la petulancia de aquellos escritores que le atribuyen a su oficio una incuestionable aura de divinidad mientras celebran y reclaman para sí –y sólo para sí- atenciones y libertades al margen de la libertad de las demás clases sociales sometidas al trabajo y la desocupación bajo la disciplina neoliberal, clases a las cuales no les queda sino trabajar por lo que les quieran pagar y bajo las condiciones que mande la patronal ("Tómelo o déjelo, la cola es larga", dicen los cirujanos de recursos humanos.); del mismo modo, tampoco me identifico con aquellos que se somatan el pecho en pose despechada y con conciencia culposa por vivir al servicio de un oficio "estéril": ni dioses ni cucarachas, asumir la conciencia de nuestras limitaciones no es igual a regodearse en la impotencia; en todo caso, la conciencia de nuestras limitaciones es apenas la conciencia de nuestra realidad, y conocer la realidad es siempre el primer paso para quererla cambiar, puesto que no hay cambio político, económico ni cultural capaz de darse al margen de profundizar el conocimiento de la misma. Partimos, pues, de nuestras limitaciones, pero con la clara intención de ir a contrapelo de las mismas.




Pero, ¿puede el solo acto de escribir, contribuir a revelarnos el mundo para transformarlo mejor? Contribuye, pienso, en la medida en que "llamar a las cosas por su nombre" implique denunciarlas; pero también en la medida en que al hacerlo seamos capaces de sentir y descifrar, sin idealizaciones, las claves de las auténticas expresiones populares y sus contraculturas en ascenso, las cuales –siempre que no sean cooptadas-, al crecer en la barriga de la cultura dominante y su retórica, pero en oposición a ella, contienen las semillas y las claves desde las cuales la realidad demanda ser transformada.




Para ello es imperativo asumir, sin complejos ni dobleces, la dicha y la desgracia de pertenecer a ésta latitud atormentada del mundo en la que se padecen con mayor ferocidad las contradicciones propias de la sociedad de clases que empiezan por la economía pero que no acaban ahí, reivindicando la capacidad de la palabra escrita cuando brota como conciencia crítica y necesidad expresiva para plantear los problemas de la realidad, sin que ello signifique abandonar las preocupaciones ni los criterios estéticos. De otra manera, ¿de qué sirve escribir sino es para desafiar la censura, directa o indirecta, que el orden impone al mensaje disidente, bajo la convicción de que no hay literatura verdaderamente libre sin la condición previa y necesaria de la libertad de los demás?




Sin duda, aspiramos cultivar un lenguaje más hermoso y entrador desde el cual podamos multiplicar la comunión que de los demás recibimos, en el sentido de ensayar desde ahí una literatura peleona y liberadora que se ponga al servicio de –como dice Walter Benjamín- hacer saltar el continuum de la historia, aludiendo a la inteligencia aún en medio del proyecto de imbecilización colectiva impuesto por la cultura del mercado y su sistema de apelaciones simbólicas emanadas de los medios de comunicación masiva: una cultura en la que no hace falta saber leer para consumir ideología con bebidas carbonatadas y papas fritas, y desde la que se santifica la organización desigual del mundo, recordándonos a diario desde la pantallita doméstica que el orden de las cosas es el resultado del legitimo triunfo de los más fuertes.




Quienes escribimos deseando dar cuenta de la cultura dominante que descuartiza lo que toca, lo hacemos movidos por la necesidad de querer anticipar las preguntas que promuevan el cambio social y ayuden a romper la desmovilización que quedo como inercia de la lógica contrainsurgente. No escribimos, pues, para escandalizar mojigatos, -cosa por demás muy fácil en una sociedad como esta- (aunque nos suceda a menudo); pero tampoco por el "libre juego" mallarmeano en el cual lo que importa es "la pureza", el signo liberado de significado, el lenguaje deslindado de experiencia, la forma liberada de contenido (¿conjunto vacío?); ni por la vocación de fetiche otorgada a la palabra impresa; todo lo cual respetamos aunque así nos suene demasiado a evasión, además de hacerle el juego a la cultura de mercado que concibe la literatura en términos de entretenimiento, espectáculo y adormecimiento.




Escribimos, pues, para darnos sin soberbias ni falsas modestias a quienes creemos que nos debemos, esperando dar la talla para meternos a fondo en la aventura de nuestro tiempo, asumiendo de manera libre y gustosa los riesgos de intentar no dormir a nadie.



publicado en la revista virtual
www.albedrio.org (http://www.albedrio.org/)


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Leví
04-Sep-2006, 19:55
:dormir:..........muy largo.....

paniquez
04-Sep-2006, 20:08
muuuuuuuuuuyyyyyyyyyyyyyyyyyy laaaaaaaaaaaaaaaaaaargoooooooooooooooooooooo!!!!!

lo leo más tarde...... cuando tenga tiempo.......

quique17
04-Sep-2006, 20:29
:dormir: solo de verlo da hueva

CHECHA
05-Sep-2006, 09:51
no lo lei, da hueva!

kinetic
05-Sep-2006, 10:28
hacete una síntesis y si se mira interesante pues más mara lo va a leer

allantuning
18-Sep-2006, 22:08
largo pisado!!!!

Motorola
19-Sep-2006, 06:37
:dormir: mmm me dio hueva leerlo lksalfkjdlkfjsakldfjaslkdjfksjfaslñkjdfasd

CHIDO
19-Sep-2006, 06:47
que hueva ya no lo termine de leer jaja solo el primer parrafo :)

cerberus_gt
19-Sep-2006, 07:19
Lamentable es la actitud como pais al ser pasivos sin sentir el deseo por la libertad cultural, en momentos donde es reprimida nuestra sociedad por motores bandalicos, de seres que en conjunto asolan nuestros dias y la zozobra vivida nos hace sentir el miedo al caminar, es cierto poco leemos, y poco escribimos, mas la globalizacion de caracteres en un pais como el nuestro el cual solamente "copia" los actos de culturas no pertenecientes siquiera a nuestro continente, en actos de verguenza por sus propias raices, decididamente se queda en ese selecto grupo al cual va dirigida las letras y que al tratar de hacer eco en una cultura en cambio, dejando de ser tradicionalista, no hace bulla en los oidos sordos de gente que busca solamente el "look" en su circulo social, y no ser la diferencia en nuestra sociedad.

heeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee dicho.

Ajdz
19-Sep-2006, 08:14
:dormir: resumen :huelga:

FX machine
19-Sep-2006, 09:32
que huva leer