wata
05-Mar-2014, 09:04
En lo que ha ediciones especiales de superdeportivos se refiere, de esas que se venden mucho más rápido de lo que puede correr el modelo en cuestión, el mundo del motor siempre vive atento a qué tiene que decir una marca como Koenigsegg. La respuesta se llama Koenigsegg One:1 del que solamente se van a producir seis unidades (a pesar de su nombre) y, por supuesto, ya están todas vendidas. A pesar de ello, la empresa sueca lo está presentando estos días en el Salón de Ginebra 2014.
Independientemente de su precio, del que no hay datos y, sinceramente, es mejor no hablar aunque solo sea por no deprimirise, Koenigsegg promete que el Koenigsegg One:1 será el coche de producción más rápido del planeta. Argumentos tiene, ya que su sobrenombre no lo tiene por casualidad: sus 1.340 CV combinados con sus 1.340 kg de peso arrojan una relación peso/potencia sin igual de 1 CV/kg.
Para conseguirlo, el One:1 de Koenigsegg equipa un motor 5.0 V8 unido a una caja de cambios de doble embrague y siete relaciones. Es es primer coche que desarrolla el primer megavatio de potencia - los anteriores 1.360 CV comentados - y tiene un par motor de 1.000 Nm disponibles entre 3.000 y 7.500 rpm. Me atrevo a decirte que no está muy lejos de la cifra que ofrece una locomotora. Por cierto. este propulsor tiene un límite de revoluciones a 8.500 vueltas.
Además, los suecos han empleado en el chasis una fibra de carbono importada de la F1 que pesa un 20% menos que la de los Koenigsegg Agera y se ha usado incluso hasta en las llantas - fabricadas en fibra de carbono -, por cierto, de 19" delante y 20" detrás. También se ha sustituido el aluminio del sistema de escape por titanio para conseguir reducir el peso al máximo. El coche también incorpora unos muelles y amortiguadores activos para ajustar la altura de la carrocería.
También destaca el One:1 por su trabajada aerodinámica, inspirada en los prototipos de la máxima categoría de Le Mans. Así, en Koenigsegg aseguran que el prominente alerón trasero, que a diferencia del Agera R y Agera S parte de la propia tapa del motor, podría generar hasta 610 kg de carga aerodinámica a 260 km/h. Esto asegura un comportamiento extraordinariamente estable a casi cualquier velocidad. Asimismo, el One:1 es capaz de soportar fuerzas laterales de más de 2G en las curvas.
Con estos datos, lo último de Koenigsegg podría alcanzar los 450 km/h (parece que de forma limitada, debido a los neumáticos) y dar al traste así con el récord de velocidad máxima del Bugatti Veyron Super Sport World Record Edition, con sus 431 km/h de punta. Pero no solo eso, sino que también puliría las cifras mínimas de los 0-200, 0-300 y 0-400 desde parado; para este último registro, podría necesitar únicamente 20 segundos. Por cierto, los neumáticos están fabricados por Michelin y son unos Pilot Sport Cup.
No podrían haber elegido mejor manera de celebrar sus 20 años de vida en la marca sueca, dado que el Koenigsegg One:1 es el modelo que está sirviendo a Koeniggseg para enmarcar en oro sus primeras dos décadas en el negocio.
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Independientemente de su precio, del que no hay datos y, sinceramente, es mejor no hablar aunque solo sea por no deprimirise, Koenigsegg promete que el Koenigsegg One:1 será el coche de producción más rápido del planeta. Argumentos tiene, ya que su sobrenombre no lo tiene por casualidad: sus 1.340 CV combinados con sus 1.340 kg de peso arrojan una relación peso/potencia sin igual de 1 CV/kg.
Para conseguirlo, el One:1 de Koenigsegg equipa un motor 5.0 V8 unido a una caja de cambios de doble embrague y siete relaciones. Es es primer coche que desarrolla el primer megavatio de potencia - los anteriores 1.360 CV comentados - y tiene un par motor de 1.000 Nm disponibles entre 3.000 y 7.500 rpm. Me atrevo a decirte que no está muy lejos de la cifra que ofrece una locomotora. Por cierto. este propulsor tiene un límite de revoluciones a 8.500 vueltas.
Además, los suecos han empleado en el chasis una fibra de carbono importada de la F1 que pesa un 20% menos que la de los Koenigsegg Agera y se ha usado incluso hasta en las llantas - fabricadas en fibra de carbono -, por cierto, de 19" delante y 20" detrás. También se ha sustituido el aluminio del sistema de escape por titanio para conseguir reducir el peso al máximo. El coche también incorpora unos muelles y amortiguadores activos para ajustar la altura de la carrocería.
También destaca el One:1 por su trabajada aerodinámica, inspirada en los prototipos de la máxima categoría de Le Mans. Así, en Koenigsegg aseguran que el prominente alerón trasero, que a diferencia del Agera R y Agera S parte de la propia tapa del motor, podría generar hasta 610 kg de carga aerodinámica a 260 km/h. Esto asegura un comportamiento extraordinariamente estable a casi cualquier velocidad. Asimismo, el One:1 es capaz de soportar fuerzas laterales de más de 2G en las curvas.
Con estos datos, lo último de Koenigsegg podría alcanzar los 450 km/h (parece que de forma limitada, debido a los neumáticos) y dar al traste así con el récord de velocidad máxima del Bugatti Veyron Super Sport World Record Edition, con sus 431 km/h de punta. Pero no solo eso, sino que también puliría las cifras mínimas de los 0-200, 0-300 y 0-400 desde parado; para este último registro, podría necesitar únicamente 20 segundos. Por cierto, los neumáticos están fabricados por Michelin y son unos Pilot Sport Cup.
No podrían haber elegido mejor manera de celebrar sus 20 años de vida en la marca sueca, dado que el Koenigsegg One:1 es el modelo que está sirviendo a Koeniggseg para enmarcar en oro sus primeras dos décadas en el negocio.
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